LOS FAMILIARES EXIGEN JUSTICIA
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, ha expresado su consternación por la muerte de 68 personas en un incendio en una comisaría en Venezuela después de que estallara un motín y ha reclamado al Gobierno venezolano que lleve a cabo una "investigación exhaustiva" sobre los hechos.
"Estamos consternados por las terribles muertes de al menos 68 personas en Venezuela después de que un incendio arrasara la cárcel de una comisaría el miércoles a raíz de presuntos enfrentamientos entre detenidos y miembros de las fuerzas de seguridad", ha manifestado la oficina en un comunicado.
Los desconsolados familiares recibían los cuerpos de decenas de reclusos fallecidos en el incendio de una comandancia policial de Venezuela, uno de los incidentes más trágicos de las últimas dos décadas en el sobrepoblado sistema carcelario del país.
Aún no se conocen los detalles oficiales de cómo se originó el incendio, pero varios familiares dijeron que, de acuerdo con el relato de los presos que sobrevivieron, habría ocurrido una revuelta y policías habrían tratado de controlarla.