La negativa de una farmacéutica a que se utilice su sedante obliga a retrasar por tercera vez una ejecución en Nevada

Las autoridades han suspendido por tercera vez la ejecución de un preso de Nevada, en Estados Unidos.

Una farmacéutica se niega a que se utilice su sedante en las sentencias de muerte, lo que ha llevado a aplazar hasta en tres ocasiones la ejecución del preso, condenado por un doble asesinato.

El abogado del reo asegura que la cárcel de Nevada adquirió la droga de forma fraudulenta y que por eso no se puede llevar a cabo la ejecución.