UNA TRADICIÓN ANUAL
Cada año la ciudad saudí de La Meca recibe por estas fechas a millones de peregrinos. Dos millones de musulmanes llegarán en los próximos días a la ciudad del profeta de su religión.
Una peregrinación masiva que requiere que Arabia Saudí esté preparando ya algunas medidas de seguridad para evitar estampidas humanas como las de 2015 en las que 2.300 personas perdieron la vida.
Por eso, el gobierno saudí ha puesto barreras que le permiten luchar contra posibles avalanchas y aplastamientos en el final de una peregrinación, que supone el cumplimiento de uno de los pilares de la religión musulmana.