GRABADA POR UNA CÁMARA OCULTA
Shantaniqua Scott, una madre soltera de 18 años, se enfrenta a cadena perpetua por causar graves lesiones a su hijo de cuatro meses al intentar asfixiarle "para poder volver a llevar una vida despreocupada", según informa el Daily Mail. La grabación de una cámara oculta instalada por los médicos del hospital en el que el menor estaba ingresado muestra a Shantaniqua poniendo una manta sobre la boca de su bebé para intentar asfixiarlo. Momentos después pone directamente su mano sobre la boca y la nariz del recién nacido mientras el niño patalea luchando por su vida.
Cuando las alarmas empiezan a sonar, aparece en la imagen el equipo médico que logra reanimar al bebé. El vídeo fue utilizado durante el juicio en el tribunal de Texas en la que se acusa de intento de asesinato a la joven Shantaniqua Scott.
"Mi bebé ha dejado de respirar"
El bebé, llamado Raymond, había ingresado anteriormente en el hospital. Los médicos pensaron en un primer momento que el niño sufría problemas estomacales, motivo por el cual fue operado y dado de alta. Pero dos días más tarde fue ingresado de nuevo ya que al parecer "había dejado de respirar".
Los médicos sospecharon entonces que el niño estaba siendo víctima de abusos, y colocaron la cámara oculta en la habitación para espiar a la madre. En esas imágenes es donde descubrieron a Scott mirando a su bebé e intentando asfixiarle. Cuando una enfermera entra en la habitación de Scott finge que está mirando el teléfono móvil. Cuando la enfermera se va, la joven persiste en su acción y coloca la mano sobre la boca y nariz de su hijo.
Cuando fue detenida, la joven confesó a la policía que no quería seguir ocupándose del bebé. Según el sargento de la policía de Fort Worth, Pedro Criado, "ella simplemente quería volver a la vida despreocupada que tenía antes de quedarse embarazada".
"También nos contó que era muy difícil ser madre soltera, que el padre de la criatura no le ayudaba y que quería acabar con el estrés". Los médicos no saben aún si el bebé tendrá lesiones cerebrales por la falta de oxígeno durante el intento de asfixia.