EL CUARTO DÍA SE PUSO ENFERMA
El Disney World hizo realidad los sueños de una joven que encontró el último pase de un ticket que no pudo utilizar en 1994 porque se puso enferma y sus padres decidieron no llevarla el cuarto día que tenían pagado.
En realidad fue su padre el que encontró la entrada mientras "estaba limpiando el sótano" y apareció en la caja fuerte, aunque ninguno de los dos estaba seguro de que el parque temático fuese a aceptar el ticket.
La propia joven ha explicado que se acercó a la chica de la taquilla con "una gran sonrisa" y le preguntó si la dejaba entrar entrar con un pase muy viejo. Entonces, la empleada le dijo que sí y se lo cambió por una entrada electrónica moderna.
"Esta ha sido una experiencia muy divertida", ha señalado la protagonista de la historia, según informa Fox News.