SE TRATA DE UNA JOVEN CHINA
Polémica en China por la disyuntiva que los médicos han planteado a una joven embarazada: salvar a su hermano mayor o a su hijo, todavía no nacido.
Yang Li tiene 24 años y estaba embarazada de 12 semanas en el momento en el que los médicos le plantearon que la única forma de salvar la vida de su hermano mayor,Yang Jun, al que diagnosticaron en 2015 un linfoma, era a través de un trasplante de su médula ósea.
Los facultativos informaron a la joven de que el trasplante podría causar daños graves en su feto. Una difícil decisión a la que tuvo que enfrentarse Yang Li y que finalmente la llevó a abortar.
El hospital realizará el trasplante tan pronto como el cuerpo de Yang Li se encuentre recuperado del aborto, según informa Daily Mail. Mientras la polémica en el país se ha desatado.