Coronavirus
En Italia sigue la lucha contra el coronavirus. El primer paciente contagiado en Turín, el llamado "paciente uno" ha vuelto a dar positivo. Se trata de un hombre de 40 años que estaba a punto de volver a casa pero un nuevo test le ha obligado a continuar en el hospital por precaución.
Preocupa también la situación del personal sanitario. Sus contagios ya representan el 8% del total, hay 2.600 sanitarios contagiados y en Lombardía han saltado las alarmas porque hay casi un 60% de salidas injustificadas.
Según datos conocidos a través de la localización de los teléfonos móviles, un 40% de la población de Lombardía, una de las zonas más afectadas por el coronavirus, sigue desplazándose habitualmente, muchos por trabajo pero otros sin causa justificada según las autoridades.
"Amigos, lo digo educadamente, pero si no lo entendéis por las buenas habrá que ser más agresivos:"
El presidente de la región septentrional italiana de Lombardía, Attilio Fontana, advirtió de que "dentro de poco" el sistema sanitario no estará "en condiciones de dar una respuesta a quien enferma", y rogó encarecidamente a la población que no salga de sus casas o de lo contrario se tendrán que aplicar medidas más estrictas.
"Amigos, lo digo educadamente, pero si no lo entendéis por las buenas habrá que ser más agresivos: no salgáis de casa", afirmó Fontana en una rueda de prensa, en la que subrayó que "desgraciadamente, el número de contagios no se reduce y sigue siendo alto".
Lombardía, cuya capital es Milán, con 16.000 casos y 1.640 fallecidos, es la región de Italia más golpeada por el coronavirus. El presidente regional casi ha suplicado a los ciudadanos: "Nadie os pide un sacrificio grande, os lo pedimos para salvar las vidas humanas". En Italia hay 26.000 contagiados y 2.503 fallecidos con el COVID-19.
Las empresas italianas pueden perder entre 270.000 y 650.000 millones por el coronavirus
Cálculos de algunas empresas de riesgo advierten del efecto de esta crisis si no se toman medidas contundentes. Las empresas italianas pueden perder entre 270.000 y 650.000 millones de euros en facturación hasta 2021 por la crisis del coronavirus, un escenario que amenaza al empleo y que Italia quiere evitar a costa de disparar su ya desorbitada deuda pública, que supera el 134 % del producto interior bruto.
La agencia de calificación crediticia italiana Cerved ha realizado estas estimaciones en un reciente estudio, y ha subrayado que las pérdidas dependerán de la duración de la pandemia y la velocidad de reacción de la economía italiana una vez superada.