Israel
La escalada de violencia crece, un palestino ha acuchillado a cuatro personas cerca de Tel-Aviv e Israel bombardea un campo de refugiados.
Israel, en coordinación con Estados Unidos, está planificando cómo responder a una posible ofensiva de Irán y sus grupos armados, Hezboláh y Hamás, tras el asesinato de los líderes de estas organizaciones esta semana. Mientras tanto, ambas milicias han intensificado sus ataques con misiles contra diferentes puntos del territorio israelí. A pesar del constante sonar de las sirenas, la población mantiene la calma.
"Israel ha vivido tantas guerras. Estamos preparados para cualquier cosa... tenemos un ejército tan potente. Créame, estamos tranquilos", asegura un residente de Jerusalén. Un turista estadounidense añade: "Nos alojamos con parientes israelíes que tienen refugios en casa. Nosotros les seguiríamos si hubiese un ataque".
La situación en Israel se vive con una mezcla de calma y resignación frente a la creciente violencia. Sin embargo, las amenazas no solo provienen del aire. Hoy, cerca de Tel-Aviv, cuatro personas fueron acuchilladas, resultando en la muerte de dos de ellas. El atacante, un palestino, fue abatido. "Pido a los ciudadanos que lleven armas", declaró el Ministro de Seguridad, Itamar Ben Gvir.
Por su parte, la ofensiva israelí en Gaza continúa. Al menos 30 personas murieron y decenas resultaron heridas en ataques israelíes a dos escuelas en Ciudad de Gaza, donde miles de desplazados se refugiaban, según la Defensa Civil de Gaza. Hamás denunció que 1.040 personas han muerto en ataques a refugios desde el inicio de la guerra. La Media Luna Roja Palestina informó del transporte de víctimas, mostrando videos de niños heridos.
Israel confirmó los ataques a las escuelas Hasán Salame y Naser, alegando que eran centros de mando de milicianos palestinos, y aseguró haber tomado medidas para mitigar daños a civiles. Ayer, bajo pretextos similares, el Ejército israelí atacó la escuela Hamama, matando a 16 personas refugiadas allí. La Defensa Civil gazatí confirmó la presencia de desplazados, mientras que Israel insistió en que se usaba como escondite de terroristas de Hamás.
Además, drones israelíes bombardearon tiendas de desplazados cerca del hospital Mártires de Al Aqsa en Deir al Balah, provocando un incendio en el campo de refugiados. Videos muestran las tiendas en llamas y personas tratando de rescatar víctimas. Wafa reportó que al menos cinco palestinos murieron en este ataque.
El conflicto prolongado está afectando gravemente a los familiares de los rehenes. Una muestra de ello es Ariel Bibas, un niño de origen argentino que fue secuestrado junto a su madre y hermano. Mañana, Ariel cumple cinco años, de los cuales ha pasado 304 días cautivo en manos de Hamás. La frustración de los familiares de los rehenes crece ante la falta de avances en su liberación.