Guerra Israel-Hamás
Infantería, blindados y fuerzas de combate israelíes siguen atacando el interior de Gaza en una incursión terrestre.
Israel mantiene la Franja de Gaza incomunicada. No funcionan ni Internet ni las conexiones telefónicas, mientras intensifica sus ataques por aire y por tierra. En esos bombardeos, han muerto 2 líderes de Hamás esta noche.
Infantería, blindados y fuerzas de combate israelíes siguen atacando el interior de Gaza este sábado tras los intensos bombardeos de la noche. Israel busca los sitios de lanzamiento de misiles guiados antitanques y los centros de mando de los islamistas. Se trata de la mayor incursión terrestre desde el ataque de Hamás del pasado 7 de octubre.
El Ministerio de Sanidad de Gaza ha informado de 377 muertes esta noche. Las autoridades gazatíes han recopilado información de 7.703 fallecidos en total. Entre ellos hay 3.195 menores, 1.863 mujeres, además de 19.743 personas heridas. Además en Cisjordania hay 111 muertos y 1.950, por lo que en total se han contabilizado 7.814 muertos y 21.693 heridos.
La Franja sufre un apagón casi total y hace imposible, según la Organización Mundial de la Salud, que las ambulancias lleguen hasta los heridos. El director general de la OMS, Tedros Adhanom, ha asegurado que los "intensos bombardeos" sobre Gaza son "extremadamente preocupantes".
En la frontera con Egipto siguen esperando camiones con ayuda humanitaria. El presidente de Egipto, Abdelfatah al Sisi, ha pedido "presionar" para que llegue más ayuda humanitaria al enclave. Al Sisi ha recordado que en Gaza existe una "necesidad gigantesca" que no se puede cubrir con "40, 60 o 100 camiones" de ayuda humanitaria.
La tensión en la frontera de Israel con Líbano también aumenta. El número de desplazados en el Líbano por los ataques cruzados entre Hizbulá y las fuerzas israelíes se eleva ya a cerca de 29.000. Hizbulá y las fuerzas israelíes están enzarzados en ataques cruzados a través de la línea divisoria entre ambos países, donde también se han producido acciones reivindicadas por facciones palestinas presentes en el territorio libanés.
Naciones Unidas trata de buscar una salida a la violencia, sin éxito. El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha denunciado que la entrada de las fuerzas israelíes en Gaza supone "un nuevo nivel de violencia y dolor" para la población gazatí.
Ante la situación, la Asamblea General ha aprobado una resolución por amplia mayoría que pide el fin de las "hostilidades en Gaza". La resolución incluye "un rechazo al traslado forzoso de la población civil palestina". Israel considera que esa petición es "despreciable". El embajador israelí Gilad Erdan se despachó en calificaciones contra la ONU, una institución "que ya no tiene una pizca de legitimidad o relevancia".
Los familiares de los rehenes han confesado su temor por las consecuencias que tendrá para ellos la ofensiva israelí. En un comunicado, piden al primer ministro Benjamin Netanyahu que centre sus esfuerzos en rescatarlos con vida. Asimismo, cientos de manifestantes han tomado la estación central de Nueva York para pedir un alto en fuego en Oriente Próximo. La protesta fue convocada por una organización judía y la policía tuvo que intervenir para desalojarlos.