ES EL QUINTO PRESIDENTE DE EGIPTO

El islamista Mohamed Morsi ya es presidente de Egipto tras su juramento oficial

Mohamed Morsi ha abogado en su toma de posesión por el respeto a las instituciones y por la defensa de la libertad de poderes.

Mohamed Morsi ha tomado posesión formal de su cargo como quinto presidente de Egipto en un acto celebrado en la sede del Tribunal Constitucional durante el que se ha comprometido a respetar las instituciones egipcias y a defender la división de poderes.

"Juro por Dios, que es grande, preservar con lealtad el sistema republicano, respetar la Constitución y la ley, tener en consideración los intereses del pueblo de manera total y preservar la independencia de la patria, su integridad y su territorio", dijo Morsi en un acto en la sede de Constitucional, en el sur de El Cairo.

Vestido con traje azul oscuro y corbata roja, Morsi leyó el juramento de un papel ante el pleno, presidido por el juez Faruq Sultan, que encabeza también la Comisión Electoral Presidencial. Después, el islamista pronunció un breve discurso en el que destacó la importancia del Constitucional, pese a que en un principio quería prestar juramento como presidente ante el Parlamento, disuelto por una decisión de este tribunal que halló irregularidades en su composición. "Respeto y valoro el Tribunal Constitucional y sus fallos", afirmó Morsi, que lo calificó de "componente fundamental" para construir el futuro del nuevo Egipto, donde haya una "verdadera" democracia y estabilidad.

"Todos tenemos interés en que debe permanecer independiente, fuerte, efectivo, sin que nadie tenga influencia sobre él, una institución libre en un país libre", aseguró. Es presidente que renunció a su militancia en los Hermanos Musulmanes tras el triunfo electoral, manifestó su respeto hacia el poder judicial y legislativo. "Desempeñaré mi papel para garantizar la independencia de estos dos poderes y del ejecutivo", afirmó.

Días antes del anuncio de los resultados electorales, la junta militar que ha gobernado el país desde el derrocamiento del régimen de Hosni Mubarak aprobó unas polémicas enmiendas constitucionales por las que asumía el poder legislativo, tras la disolución del Parlamento, y dejaba al presidente las funciones ejecutivas.

Morsi destacó que "nace hoy un Estado fuerte con su pueblo, su historia, sus creencias y sus instituciones, en cuyo corazón está el Tribunal Constitucional". Antes de la intervención del presidente, sonó el himno nacional y pronunciaron sendos discursos uno de los vicepresidentes de la Corte, Maher el Serri, y Faruq Sultan, que destacó que Mursi es "el primer presidente elegido por voluntad popular y democrática en unas elecciones limpias".

Más sobre este tema: