LAS AUTORIDADES ESTÁN DESBORDADAS
De un extremo a otro de la isla, Lesbos está ocupada por refugiados que acampan en cualquiera de sus rincones. Esperan comprar un billete que les lleve hasta Atenas: "Estamos muy cansados, llevo mucho tiempo aquí. Estoy embarazada, es demasiado duro para mi", dice una joven siria que no aparenta ni 20 años.
La isla no está preparada. No hay baños. Tampoco están habilitados los refugios para albergar a más de 20.000 personas. "Dormimos aquí en el suelo, sin nada", dice otro joven inmigrante.
El Gobierno griego está intentado agilizar los trámites para desalojar a los refugidados. Pero cada vez llegan más barcos con inmigrantes desde Turquía. La isla está al borde del colapso. La tensión empieza ya a notarse en las calles de la isla. Esta tarde hay convocada una manifestación por parte de los grupos de ultraderecha. El mensaje que mandan es claro: "No sois bienvenidos".