El prototipo se ha presentado en Tokio y tiene 300 km de autonomía
El cine ya había fantaseado con ello. Esta motocicleta no nos llevará al futuro utilizando desperdicios como combustible, pero sí a 300 km de distancia si llenamos el tanque de excrementos.
La ha presentado un fabricante de inodoros en Tokio. Tiene una cilindrada de 250 cc y, a pesar de su aspecto y de lo que parece insinuar alguno de los vídeos promocionales que se han lanzado, el conductor no es una fuente de combustible válida.
La empresa que la ha ideado ha hecho hincapié en que no funciona con heces humanas, sólo con excrementos animales y otros desechos orgánicos. El diseño de la peculiar motocicleta atrae miradas, aunque en algunos casos pueda no tener el efecto deseado.
El prototipo puede superar los 70 km/h y se ha presentado como una alternativa ecológica a otros medios de transporte. Uno de los principales atractivos de este vehículo es el bajo coste del combustible que emplea, especialmente teniendo en cuenta los actuales precios de los carburantes convencionales. Aunque probablemente no le faltarían compradores, por el momento no está prevista su comercialización.