Crisis migratoria
La frontera entre Polonia y Bielorrusia ha sido asaltada por la fuerza por un grupo de más de 200 migrantes, según informa la Guardia de Fronteras polaca.
La crisis migratoria, desatada por el envío de migrantes ilegales a la frontera polaca por parte del régimen bielorruso parece no tener fin. En las última horas, alrededor de dos centenares de personas han intentado cruzar la frontera entre Polonia y Bielorrusia a la fuerza, atacando de manera violenta a la Policía. Según el comunicado de la Guardia de Fronteras, los asaltantes atacaron a los guardias, atentando contra su seguridad lanzado incluso bengalas y gases lacrimógenos. Se estima que había un grupo de, aproximadamente, 200 personas y varios grupos de decenas de personas. Con este, son 195 los intentos registrados de cruzar la frontera con la esperanza de entrar en la Unión Europea.
Detención por tráfico de personas
Además, se ha llevado a cabo la detención de nueve personas sospechosas de organizar una red de tráfico de personas en la frontera. Entre los detenidos se encuentran cuatro personas de nacionalidad polaca, dos ucranianos y un alemán de origen azerbayano, que se encontraban junto a 34 refugiados que intentaban cruzar la frontera.
La UE acusa al dictador bielorruso
Alexander Lukaschenko, dictador bielorruso, está siendo señalado por la Unión Europea de buscar la inestabilidad del continente a través de los refugiados, procedentes de Siria, Afganistán e Irak, y que están siendo directamente trasladados a la frontera con visas de turismo. El dictador parece estar utilizando una nueva manera de lograr sus objetivos, creando conflicto entre países a través de medios que, a pesar de no ser pacíficos, no desatan la violencia de una guerra.