NUEVA YORK | LA CASA BASURERO
Detrás de lo que parece un simple contenedor de basura se encuentra realmente un hogar. El ingenio de un diseñador californiano, cansado de la continua subida de los alquileres en Nueva York, ha demostrado que este pequeño habitáculo también puede servir de vivienda.
Gregory Koehn pagó 2.000 dólares por el antiguo contenedor, poco más de 1.500 euros, e invirtió algo más en su acondicionamiento, convirtiéndolo así en su hogar.
"Vi que el contentedor tenía forma de tienda de campaña y pense ¿porque no lo convierto en una casa?" afirma el californiano.
Ha creado una casa a la que no le falta detalle, cuenta con cocina, cama y baño en el interior, tiene pequeños espacios para guardar cosas y hasta enchufes donde puede conectar aparatos eléctricos. También dispone de una barbacoa en su terraza. El agua corriente la obtiene gracias a un pequeño tanque instalado en el techo.
Este sistema que el mismo ha ideado permite incluso la entrada de luz a través de dos ventanas laterales, pudiendo aumentar la claridad gracias a un techo retráctil que ha incorporado. "Ha sido un reto conseguir una casa que pase desapercibida en medio de la ciudad" declara Gregory.
Un reto que ha superado por lo que ahora ya tiene una pequeña vivienda en el distrito de Brooklyn que le ahorra el alojamiento cada vez que tiene que viajar a la Gran Manzana por motivos de trabajo.