Ataque avispas
Andrew Powell, de 57 años, fue atacado brutalmente por un enjambre de avispas mientras alimentaba a sus gallinas. Tras perder el conocimiento varias veces, continúa descubriendo nuevas picaduras en su cuerpo, algunas en zonas tan insólitas como la cabeza y los glúteos.
En una experiencia que él mismo describió como "algo sacado de una película", Andrew Powell, un hombre de 57 años residente en Gales, sufrió un ataque masivo por parte de un enjambre de avispas mientras realizaba tareas rutinarias en su jardín el pasado 18 de agosto.
Powell, quien acababa de regresar de un paseo en bicicleta y se disponía a alimentar a sus gallinas, fue sorprendido por las avispas, que lo atacaron ferozmente, resultando en más de 240 picaduras en varias partes de su cuerpo, incluidas la espalda, la cabeza y los glúteos.
El ataque se produjo de manera súbita, dejando a Powell sin tiempo para reaccionar. "Fue algo sacado de una película", relató el hombre en una entrevista con BBC Radio, recordando el terror que sintió cuando las avispas lo rodearon. En un intento desesperado por escapar, Powell corrió hacia su casa, pero las avispas lo siguieron, continuando el ataque incluso después de que lograra llegar a la ducha. Su esposa, Gina, también fue picada mientras intentabaayudarlo, arrojando agua a las avispas para dispersarlas, sin éxito.
Durante el ataque, Powell llegó a perder el conocimiento en varias ocasiones debido a la cantidad de picaduras y al dolor intenso que sufría. Fue trasladado de urgencia a un hospital local, donde inicialmente se creyó que había sufrido alrededor de 160 picaduras. Sin embargo, al examinarlo con mayor detenimiento, los médicos descubrieron que las picaduras eran muchas más. "Cada día descubro más picaduras en mi cuerpo. En un lado de mi trasero tengo 50 picaduras y 20 en la parte posterior de mi cabeza", compartió Powell, quien ahora se recupera en su hogar. Aunque el dolor sigue siendo insoportable, se siente afortunado de estar vivo y agradecido por el apoyo recibido durante su recuperación.
El incidente ha dejado a Powell con un temor comprensible de volver a salir al exterior, especialmente después de que un técnico de control de plagas le advirtiera sobre la presencia de miles de avispas en la zona. Expertos en salud han reiterado la importancia de buscar atención médica inmediata en casos de picaduras de avispas, especialmente si se presentan síntomas que puedan indicar una reacción alérgica severa, más allá del dolor e hinchazón comunes.
Este ataque ocurre en un contexto de creciente preocupación por el aumento de la actividad de avispas en el Reino Unido, especialmente durante los meses de verano, cuando los enjambres se vuelven más agresivos y numerosos. Según expertos, factores como el cambio climático y la urbanización están contribuyendo a un comportamiento más errático de estos insectos, lo que ha llevado a un incremento en los incidentes reportados.
En respuesta, las autoridades sanitarias han intensificado las campañas de concienciación para que la población tome precauciones adicionales al realizar actividades al aire libre.
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