FUE OPERADO A COMIENZOS DE ESTE AÑO
Andrew Wardle ha pasado uno de los momentos más delicados de su vida cuando pensaba que ya todo podía mejorar. A primeros de año se le implantó un pene biónico ya que él nació sin este miembro. Esta anomalía se debe a un raro defecto congénito que significa que, aunque cuenta con testículos, el pene no crece hacia el exterior.
Durante años se ha sometido a varias intervenciones y a principios de 2018 se le implantó un pene biónico en una operación que duró diez horas. Se le colocó un implante usando la piel de su antebrazo. Para conseguir una erección, el mecanismo cuenta con una válvula en el escroto que inyecta suero salino al órgano.
Sin embargo, hace pocos días tuvo que ser ingresado después de que su pareja le encontrara inconsciente al llegar a casa. Wardle ha pasado cinco días en coma, al parecer por un problema en la vesícula biliar, según informa Daily Mail. Este susto se produjo poco después de que la pareja mantuviera relaciones sexuales por primera vez, lo que hizo creer a su esposa que ésa era la causa del colapso.