EN SU JUVENTUD DONABA SEMEN UNA VEZ A LA SEMANA
Con estas donaciones, Tood conseguía el dinero que necesitaba y ayudaba al mismo tiempo a otras familias. Por cada aportación, le pagaban 50 dólares.
Al registrarse en el banco de semen, Tood tuvo que aportar sus datos. Así fue como lo encontró Virginia, su primera hija, que con 18 años sintió la curiosidad de saber cuáles eran sus orígenes. La joven le envió un mensaje a su padre y de esta forma como se puso en contacto con él.
Después de encontrar a Virginia, Tood descubrió la identidad de ocho hijos más y así hasta 60. Pensilvania, Nueva York o California son lugares donde se encuentran algunos de sus hijos.
Sus amigos le han apodado el semental de Tennessee.