HOLANDA | LOS ATRACADORES SALIERON HUYENDO
Sucedió en un bar de Holanda, y la cámara de seguridad lo captó todo. Unos ladrones entran a robar al establecimiento, regentado por una mujer de origen chino. Los ladrones, con las caras cubiertas, llevan armas blancas.
La mujer, lejos de acobardarse, decide hacerles frente. ¿Y cómo lo hace? Pues nada menos que con aceite hirviendo. La propietaria les arroja el aceite para defenderse y es ayudada por un cliente que coge una silla y se lía a golpes con los ladrones.
Entre golpes, aceite hirviendo y resbalones en el suelo, los dos cacos terminan huyendo sin conseguir su objetivo.