LA EMBARCACIÓN SALIÓ DE TURQUÍA
La guardia costera griega recuperó esta madrugada el cuerpo sin vida de un niño ante la isla de Kos, en el mar Egeo, tras el naufragio de una embarcación con una quincena de refugiados que habían salido desde la costa turca.
Los guardacostas pudieron rescatar en el mar a diez refugiados y migrantes cuya barcaza había volcado. Otras cuatro personas habían logrado llegar por sus propios medios a la costa. Con el empeoramiento del tiempo, los naufragios ante las islas griegas se han convertido en un drama cotidiano.
A pesar de que la distancia entre las islas y la plataforma continental turca a menudo no supera los cinco kilómetros, los vientos y el oleaje en esta época son fuertes y se convierten en un riesgo adicional para unas embarcaciones que son de pésima calidad y que siempre van sobrecargadas.
Mientras tanto, en la isla de Lesbos miles de personas están atrapadas en tierra desde hace varios días por la huelga de los trabajadores del transporte marítimo que impide que los transbordadores con refugiados puedan hacer su ruta diaria hacia el puerto de El Pireo.
El primer ministro, Alexis Tsipras, y el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, tienen previsto visitar los campamentos de acogida y de registro en esta isla. Schulz llegó ayer a Atenas en una visita de dos días centrada en hacerse una imagen de la situación de los refugiados en Grecia.