[[RELATEDEl presidente interino encarga un gobierno de unidadBen Alí, el policía que se hizo con el poderLa revolución en las redes sociales[[/RELATED El nuevo presidente interino de Túnez, Fued Mebaza, prometió crear un Gobierno de "unidad nacional" para abordar un proceso de transición en el que nadie será excluido, mientras el país permanece bajo tensión y con dudas sobre la capacidad de las autoridades para controlar la situación. Los disturbios y saqueos volvieron a reproducirse en la capital y varias regiones, aunque diversas fuentes atribuyeron la mayoría de los incidentes a milicias y partidarios del régimen del huido presidente, Zine el Abidine Ben Alí, en un intento de desestabilizar el proceso de transición. El Consejo Constitucional anunció la designación del presidente del Parlamento, Fued Mebaza, como nuevo presidente interino del país, descartando así cualquier posibilidad de un regreso al poder de Ben Alí. El Consejo -la máxima autoridad legal en cuestiones constitucionales- proclamó un "vacío de poder" y nombró a Mebaza presidente interino en sustitución del primer ministro, Mohamed Ghanuchi, que el viernes había asumido la jefatura del Estado. De esta forma, el organismo aplicó el artículo 57 de la Constitución, que señala que en el caso de "situación vacante de la presidencia de la República por muerte, dimisión o impedimento absoluto" el Consejo debe declarar ese vacío y nombrar al presidente del Parlamento como presidente interino. El período que fija la Constitución para esa presidencia interina es de 45 días como mínimo y 60 días como máximo tras el cual deben convocarse elecciones presidenciales a las que no podrá presentarse el mandatario interino. El artículo 56 por el que Ghanuchi asumió el viernes la presidencia interina sólo habla de "caso de impedimento provisional del presidente" por lo que si el primer ministro hubiese permanecido en el puesto quedaba abierta la posibilidad de un regreso al poder de Ben Alí, lo que había sido criticado duramente por la oposición y por gran parte de la población tunecina. "El interés superior del país es la formación de un Gobierno de unidad nacional", dijo Mebaza durante su juramento como presidente y encargó a Ghanuchi, a quien confirmó como primer ministro, la formación de ese nuevo Ejecutivo. Asimismo, prometió defender el pluralismo y la democracia y juró fidelidad a los principios de la Constitución. Ahmed Brahim, secretario general del movimiento Etajdid (Renovación), el único partido de la oposición tunecina con representación parlamentaria, demandó la "ruptura definitiva con los fundamentos del régimen despótico" de Ben Alí y el procesamiento de los responsables de las muertes en las revueltas y de los implicados en asuntos de corrupción.