SEGÚN GULF NEWS JORDAN
Fueron unos dolores en el abdomen los que alertaron a Hanan Abdul Karim Mahmoud, mujer jordana de 36 años, de que algo no iba bien en su cuerpo. Tras dar a luz y recibir el alta, sufría una serie de vibraciones en su tripa que alertaron a su madre, Majed Abdul Hamid, y que hicieron que visitase el hospital. "Mi hija sufría dolores graves y no podía moverse", dijo, y fue allí donde descubrieron el por qué de sus molestias: había un móvil en su vientre.
Según informa Gulf News Jordan, el objeto habría llegado ahí tras la práctica de una cesárea. Ramallah, ginecólogo que atendió a Hanan, habría dejado dentro su telefóno en el abdomen de la paciente de manera accidental, y de ahí las vibraciones que notaba la mujer.
Del caso se ha hecho eco el Parlamento jordano, y Salim Al Bataynah, un miembro de él ha instado al gobierno de Jordania que dimita como consecuecia del escándalo ocasionado.