PROVOCÓ GRAVES INUNDACIONES
Todo empezó con una tubería de agua rota cerca de las instalaciones de la Universidad de California en Los Ángeles.
La rotura del tubo dejó salir un géiser de agua de unos nueve metros de alto que provocó graves inundaciones en la zona y cubrió partes del campus.
Tanto es así, que ha habido que rescatar en balsas hinchables a personas atrapadas en estacionamientos subterráneos.
El tubo se rompió debajo de Sunset Boulevard, lo que convirtió la avenida en un río caudaloso y arrojó millones de litros de agua a través de las instalaciones deportivas de la escuela.
La escena era de auténtico caos: había estudiantes que jugaban y bromeaban con el agua mientras helicópteros sobrevolaban la zona y había numerosos agentes de policía y bomberos en el lugar.