REACCIONES AL GALARDÓN

Las galardonadas con el Nobel de la Paz: "Es un premio a las mujeres"

Ellen Johnson-Sirleaf, Leymah Gbowee y Tawakkul Karman, han defendido que el mérito del premio corresponde a todas las mujeres.

La presidenta liberiana, Ellen Johnson-Sirleaf, una de las tres galardonadas este viernes con el Nobel de la Paz 2011 junto a Leymah Gbowee y Tawakkul Karman, ha defendido que el "mérito" del galardón es de todos los liberianos, pero en especial de las mujeres, por el papel que éstas desempeñaron en la consecución de la paz y el fin de la guerra civil en el país africano.

"Lo acepto en nombre del pueblo liberiano, así que el mérito es de ellos", ha declarado la presidenta, que la semana que viene se juega su reelección, en declaraciones a la CNN. "En los últimos ocho años, hemos tenido paz y todos y cada uno de ellos han contribuido a esta paz", ha destacado.

Para Johnson-Sirleaf, la paz que acabó con 14 años de guerra civil debería atribuirse sobre todo a las mujeres liberianas, "mujeres de todos los estratos, que retaron a la dictadura del ex presidente Charles Taylor y que permanecieron bajo el sol y la lluvia trabajando por la paz en el país".

El premio también ha recaído en la activista liberiana Leymah Gbowee y la activista yemení Tawakkul Karman. De Gbowwe, ha resaltado que "movilizó y organizó a las mujeres de todas los grupos étnicos y religiosos a fin de garantizar la participación de la mujer en las elecciones".

La activista yemení Tawakkul Karman ha declarado que el Nobel supone una victoria para los activistas que luchan por la democracia en su país y ha asegurado que seguirán con sus "movilizaciones pacíficas" hasta la conquista plena de "un Yemen democrático y moderno".

"Ésta es una victoria, en primer lugar y sobre todo, para los jóvenes", declaró a Al Yazira. "Estamos aquí para conquistar nuestra libertad y nuestras dignidad en su plenitud. Nuestra revolución juvenil aspira a conquistar plenamente nuestros derechos", prosiguió, en declaraciones desde la 'Plaza del Cambio' de Saná, epicentro de las protestas.

"No permitiremos que nuestra revolución quede incompleta. Queremos un Yemen democrático y moderno. Eso es lo que la juventud, los mártires y los heridos, han jurado conquistar. Continuaremos con nuestras movilizaciones pacíficas", manifestó.

Más sobre este tema: