HAY UN NÚMENO 'INCONTABLE' DE MUERTOS
Los carros de combate y las tropas del líder libio, Muamar Gadafi, han entrado este domingo en el centro de la ciudad de Misrata, en el oeste, donde se ha registrado un número "incontable" de víctimas, según informaron fuentes locales.
Los habitantes de la ciudad, el único reducto de los rebeldes en el oeste, han informado de que las fuerzas aéreas occidentales han atacado a lo largo de la noche las posiciones de Gadafi en la zona, pero no han podido impedir sus ofensivas.
Un portavoz de los opositores en Misrata, Abdelbasset, ha informado que "hay enfrentamientos entre los rebeldes y las fuerzas de Gadafi". "Sus carros de combate están en el centro de la ciudad, y hay tantas víctimas que no podemos contarlas", ha agregado. "Están utilizando una estrategia de tierra quemada, incendiando y arrasando todo a su paso", ha denunciado Abdelbasset.
Por su parte, un vecino de la ciudad, Sami, ha declarado que "dos personas han muerto de momento a manos de los francotiradores, que continúan sobre los tejados". "Les apoyan cuatro carros de combate, que están patrullando la ciudad, y la gente tiene muy difícil salir de sus casas", prosiguió. Asimismo, "han rodeado el puerto con barcos y están impidiendo la entrada de las ayudas", agregó.
A juicio de Sami, el objetivo de las fuerzas de Gadafi es hacerse con el centro de la ciudad para, una vez dentro, utilizar a sus habitantes como escudos humanos frente a los ataques aéreos occidentales. "Están allí para protegerse de los ataques aéreos", ha declarado.
De momento es imposible verificar las cifra de víctimas porque las fuerzas gubernamentales impiden la entrada de los periodistas den Misrata. Las autoridades no se han pronunciado de momento.
Las tropas de Gadafi -incluidas las unidades de la 32 brigada, comandadas por uno de sus hijos, Jamis Gadafi- mantienen sitiada la ciudad desde hace días, pero hasta este domingo no habían conseguido pasar del extrarradio.
Misrata, situada a unos 200 kilómetros al este de Trípoli, es la tercera ciudad de Libia, con sus 300.000 habitantes. Según la población local, parte de la localidad ha quedado destruida por los disparos de la artillería gubernamental, que en los últimos días han causado numerosas muertes.