Gasoducto
Francia se ha opuesto hasta ahora al proyecto del nuevo gasoducto, aunque tras las peticiones reiteradas de Pedro Sánchez y Olaf Scholz, nuestro país vecino ha accedido a examinar dicha posibilidad.
El ministro francés de Economía, Bruno Le Maire, ha anunciado este martes que va a examinar el posible proyecto del nuevo gasoducto con España, el MidCat. Esta noticia se ha producido, según el ministro, a causa de las peticiones del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el canciller alemán, Olaf Scholz, quienes son considerados "amigos".
Hasta el momento, Francia se ha opuesto a dicho proyecto hasta el día de hoy, donde parece haberse abierto una posibilidad. Le Maire ha asegurado que "desde el momento en que el presidente del Gobierno español y el canciller alemán lo piden, desde que los amigos lo piden, examinamos la demanda de nuestros amigos, de nuestros socios".
"España y Alemania son socios muy próximos de Francia, de forma que cuando hacen una propuesta la examinamos", ha afirmado el ministro de Economía francés. Este también ha recordado igualmente que este proyecto de infraestructura "es una cuestión muy antigua".
¿Qué piden Sánchez y Scholz?
Ambos gobiernos, el español y el alemán, han reiterado este martes una posición favorable al respecto en Berlín. En la reunión mantenida en la mañana de hoy, el objetivo del gobierno alemán ha sido abordar la estrategia de seguridad nacional del país para los próximos meses, y precisamente en ese contexto, la crisis energética preocupa enormemente en Berlín. Así, la presencia de Pedro Sánchez en tal reunión es una señal de lo que más necesita su gobierno en estos momentos: reducir lo antes posible su dependencia energética de Rusia.
El canciller alemán, Olaf Scholz, ha subrayado hoy el "apoyo total" de su Gobierno al MidCat como solución "a largo plazo" al suministro europeo de gas. La "seguridad de los suministros es parte de la seguridad nacional, alemana y europea", ha asegurado Scholz durante la comparecencia con Pedro Sánchez como invitado.
Los dos países, Francia y España, ya trabajaron anteriormente en la posibilidad de construir un gasoducto entre los dos países por Cataluña (MidCat) que se añadiría a los dos que hay en la parte occidental, pero se abandonó en 2019.
El Ministerio francés de la Transición Energética señaló hace dos semanas sus fuertes reticencias a este nuevo gasoducto, a pesar de las declaraciones de varios responsables europeos a favor de la infraestructura en el contexto de la situación de precios de la energía históricamente altos debido a la invasión rusa de Ucrania.