EN EL Libro 'Causas no naturales',
Diana de Gales murió en un accidente de coche en París el 31 de agosto de 1997, su muerte conmocionó al mundo. Ahora, 22 años después, el forense Richard Shepher ha publicado el libro 'Causas no naturales', en el que da detalles hasta ahora desconocidos de la muerte de la princesa.
"La de Diana fue una lesión muy pequeña, pero en el lugar equivocado", asegura el forense, que además señala que jamás había en su carrera una herida tan rara. Richard Shepherd considera que Lady Di habría sobrevivido si estuviera usado el cinturón de seguridad y "habría aparecido en público solo dos días después con huesos rotos y moretones".
El doctor Shepherd, que ha revisado las pruebas en el caso, asegura que la pequeña y fatal herida en una vena en uno de sus pulmones fue increíblemente rara. Ha rechazado además las teorías de conspiración que rodean su muerte, según recoge el diario The Mirror.
Richard Shepherd asegura que la muerte de la Princesa de Gales es un "ejemplo clásico" de un caso "y si". "Si hubiera estado usando el cinturón de seguridad, si solo hubiera golpeado el asiento frente a ella en un ángulo ligeramente diferente o una velocidad más lenta, y si hubiera sido puesta en una ambulancia inmediatamente después del accidente del túnel Pont de l'Alma", escribe en su libro.
"La patología de su muerte es, creo, indiscutible. Pero alrededor de esa diminuta y fatal lágrima en una vena pulmonar se tejen muchos otros hechos, algunos de los cuales son lo suficientemente opacos como para permitir que florezca una multitud de teorías", señala.