OCURRIÓ EN DRESDE | SE CONOCIERON EN UNA WEB
Las autoridades alemanas arrestaron en noviembre de 2013 a un oficial de policía, identificado como Detlev G., por su presunta participación en el homicidio y descuartizamiento de un hombre de 59 años y origen polaco en Dresde, Alemania.
El policía sospechoso habría admitido que cortó la garganta de la víctima, quien fantaseaba desde su juventud con ser asesinado y comido por otra persona.
"La víctima había estado fantaseando con ser asesinado y devorado por un tercero", dijo el jefe de policía de Dresde, Dieter Kroll.
Ahora, los fiscales alemanes han pedido diez años y medio de cárcel para el expolicía por asesinato, pero no la pena máxima en Alemania, que es por lo general de 15 años, debido a que la víctima había pedido ser asesinado.
"Los fiscales creen que el acusado es culpable de asesinato en un caso de matar motivado por un deseo de satisfacción sexual", dijo el portavoz del Tribunal Ralf Hoegner.