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El fenómeno de 'El Niño' altera el invierno en América Latina: "Es una locura tener un agosto como este"

Chile y Argentina alcanzan temperaturas récord en pleno invierno austral.

Un hombre en bicicleta en Santiago (Chile)EFE

Los parques de Buenos Aires presentan una imagen nada acorde con estas fechas. Gente haciendo deporte o tumbada al sol en pantalón corto y en camiseta sin mangas a pesar de que están en pleno invierno. Varias ciudades de Argentina y de Chile han superado los 30 grados cuando las máximas habituales para esta época del año suelen rondar los 14 grados. Los científicos lo relacionan con el fenómeno de 'El Niño'.

"Creo que son los efectos del calentamiento global. Es una locura tener un agosto como este, es impensable un invierno así. Pero bueno, lo disfruto y trato de tomar el sol", asegura Caterina Shirado a 'Associated Press' en Buenos Aires. Argentina registra su mes de agosto más cálido en 117 años y en provincias como Salta se han registrado 37 grados de temperatura.

En Chile miran con preocupación los efectos del calor en el derretimiento de la nieve acumulada en las montañas, que es vital para el abastecimiento de agua en la capital. Los expertos aseguran que haca diez años se registraban dos olas de calor al año y, en cambio, ahora rondan nueve.

El fenómeno de 'El Niño' se caracteriza por un incremento de la temperatura marítima, que fluctúa entre +1,5 y 6 ºC por encima de lo normal, lo que provoca precipitaciones, inundaciones y aludes, además de las olas de calor. En Santiago de Chile, Buenos Aires y Montevideo se volverá a marcas normales en los próximos días, pero se cree que las olas de calor ocurrirán cada vez con más frecuencia.

A este fenómeno climatológico se suman los efectos del cambio climático, según los expertos. En Bolivia, preocupa la situación del lago Titicaca, el lago navegable más alto del mundo y fuente de vida para las comunidades Aymara en los altiplanos bolivianos. Las autoridades bolivianas han declarado una alerta por la disminución crítica del nivel del agua porque está afectando la forma de vida de quienes dependen de sus aguas. Además, las autoridades del Canal de Panamá han anunciado que restringirán la navegación de barcos hasta 2024 por la prolongada sequía que sufren.