HA OCURRIDO EN UNO DE LOS ESTADOS MÁS POBRES DE LA INDIA
23 niños han muerto y otros tantos se encuentran hospitalizados tras ingerir en el comedor de su escuela una comida envenenada, proporcionada de manera gratuita por el Gobierno local en Bihar, uno de los estados más pobres del norte de la India.
Los niños, de cuatro a doce años, fallecieron tras almorzar en su colegio una comida de arroz, soja y lentejas. Tres de los pequeños hospitalizados se encuentran en estado grave, el resto está fuera de peligro. El cocinero de la escuela, que también comió dichos alimentos, permanece en el hospital.
El veneno era un pesticida organofosforado, un químico que según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades se utiliza comúnmente en la agricultura.
Se investiga si el envenenamiento fue provocado. Las autoridades locales no descartan que el veneno fuera añadido a la comida intencionadamente.
La intoxicación masiva de los menores provocó la ira de cientos de personas de la localidad de Masrakh, quienes han salido a la calle como protesta para reclamar medidas contra la administración de la escuela. Los manifestantes quemaron autobuses y atacaron las oficinas del Gobierno y del colegio donde ocurrió el envenenamiento. Aseguran que la policía y los servicios médicos tardaron demasiado tiempo en responder y que por eso se perdieron más vidas.
El alimento se servía cada día a los niños de esta escuela, en la aldea de Mashrakh, como parte de un gran programa nacional de lucha contra la desnutrición infantil que provee almuerzos a más de 120 millones de niños en la India. Tan sólo en Bihar, 20 millones de niños forman parte de este programa. El problema es la precariedad del sistema de control alimentario, en el que aún está por desarrollar la cadena de frío, por lo que las intoxicaciones alimentarias son frecuentes. En algunas ocasiones los jóvenes han denunciado el hallazgo en sus platos de insectos, ranas, lagartos e incluso ratas.
Además, este tipo de programa se desarrolla en numerosas ocasiones con el apoyo de organizaciones locales, a veces vinculadas con políticos o empresarios locales, por lo que está en muchos casos marcado por el fraude y la corrupción.