LOS AMORES DE HOLLANDE SACUDEN EL ELÍSEO
El presidente de Francia, François Hollande, ha pasado todo el fin de semana en el Elíseo encerrado en su despacho, tras destaparse su supuesto idilio que mantiene con una actiz, y que ha llevado a la primera dama a ser ingresada.
La rueda de prensa, que se efectuará dentro de unas horas iba a servir servir para reconstruir su imagen relanzando sus reformas sociales. Sin embargo y tras salir su supuesto romance, ahora la pregunta que todos se hacen es si reconocerá que tiene nueva novia.
Su equipo le ha recomendado que aguante la tormenta y defienda su derecho a la intimidad. "Yo considero, y a lo mejor soy muy clásico, que la vida privada es la vida privada" ha asegurado su ministro de exteriores Laurent Fabius. Aunque lo cierto es que el supuesto romance se ha convertido en un asunto público que se debate en televisión.
Ségoléne Royal, madre de sus cuatro hijos, también se niega a opinar del tema. "No voy a alimentar ni con una pequeña frase este culebrón que está muy lejos de las preocupaciones de los franceses" dijo anoche en un programa de televisión.
Según las encuestas, tres de cada cuatro siguen teniendo la misma opinión del presidente. Sus devaneos amorosos no interesan demasiado, pero sí su falta de seguridad. Los medios se preguntan cómo es posible que se pasee en moto solo con un guardaespaldas y tenga citas en un apartamento cuyo propietario fue condenado por estafa y podría estar vinculado a la mafia.