en la ciudad alemana de Paderborn
Más de 26.000 personas han tenido que abandonar sus hogares en la ciudad alemana de Paderborn este domingo tras el hallazgo de una bomba de casi dos toneladas que llevaba enterrada desde la Segunda Guerra Mundial y fue descubierta el mes pasado en un jardín de esta localidad del oeste del país.
La desactivación de la bomba, arrojada en su día por la fuerza aérea británica, ha obligado a la evacuación de todos los edificios en un radio de kilómetro y medio, entre ellos dos hospitales, varias residencias de ancianos, la universidad y parte del casco histórico.
Más de 1.000 voluntarios han ayudado en sus tareas a las cuadrillas de bomberos, a la Policía y los servicios de emergencia para que los residentes estuvieran fuera de la zona de peligro antes del mediodía. La bomba fue descubierta hace una semana y media durante los trabajos de construcción en un jardín y se encuentra a menos de un metro de profundidad, lo que significa que su detonación podría causar un daño devastador.