ESTUDIO REALIZADO POR LA UNIVERSIDAD DE OAKLAND
Psicólogos de la Universidad de Oakland, en Estados Unidos, han llevado a cabo un estudio en el que aseguran que quienes mantienen el contacto con sus exparejas podrían ser psicópatas. Los expertos estudiaron a un total de 861 personas para llegar a sus conclusiones y afirmar que esa relación de amistad esconde un lado oscuro en la personalidad.
El estudio apunta que prolongar el trato con una expareja puede catalogarse como una forma de mantener el contacto, sin embargo dice que son muchas las razones por las que este comportamiento esconde síntomas de psicopatía, desvelando un lado oscuro en la personalidad. Una de ellas cuando los implicados mantienen el contacto para conservar otros amigos después de la ruptura; pensamiento que encaja con una persona narcisista, maquiavélica e incluso con señales de psicopatía, según cuenta el 'Daily Mail'.
En un principio los psicólogos registraron que la mayoría de los participantes en el estudio mantenían el contacto por alguna razón estratégica. Partiendo de esta base, pidieron a la gente que elaborase una lista con cinco razones por las que continuaban siendo amigos de sus exparejas una vez terminada la relación.
La mayoría de los varones preguntados apuntaron a que lo hacían por "pragmatismo" mientras que las mujeres dieron más importancia a conservar una relación de amistad con una persona del sexo opuesto.