Coronavirus
Estados Unidos se ha convertido en el epicentro de la pandemia por coronavirus, con más de 200.000 infectados y cerca de los 5.000 muertos, y desde la Casa Blanca ya se estudia una medida pionera para tratar de frenar el elevado número de contagios que se estima se va a producir en las próximas semanas.
Y es que el Gobierno de Donald Trump estudia imponer el uso obligado de las mascarillas a toda la población, un total de 327 millones de personas. La medida no sería tanto para evitar contagiarse sino para frenar los contagios.
Y es que se estima que un 25 por ciento de los infectados en EE.UU. es asintomático, es decir, no presentan síntomas y podrían transmitir el COVID-19 sin darse cuenta.
A esta situación, se une que hay algunos Estados donde todavía no hay cuarentena ni confinamiento obligatorio, ya que argumentan que no existen aún demasiados contagiados.