COREA DEL SUR PROHIBE LAS IMPORTACIONES DE CARNE ALEMANA
Localizadas en Alemania, las primeras gallinas ponedoras con altos niveles de dioxinas. Dos veces y medio más de lo permitido. La contaminación alimentaria afecta ya a Reino Unido, Holanda y Eslovaquia. Bruselas pide calma hasta que concluyan los análisis que se están realizando en casi 5000 granjas alemanas. La Unión Europea cree que la alarma generada en todo el mundo es exagerada. Asegura que los productos contaminados están bajo control.
Escándalo. Así definen los medios alemanes la crisis alimentaria que afecta a este país y que, con más de un millón de explotaciones, está haciendo peligrar uno de sus sectores económicos más importantes.
Desde marzo se sabía que había partidas de carne de porcino que duplicaban el nivel de dioxinas permitido, pero sólo hace 4 días que las autoridades decidieron tomar medidas cerrando 4.700 granjas.
El gobierno asegura que no hay ningún peligro, pero el daño ya está hecho. La contaminación afecta a Reino Unido, Países Bajos y Eslovaquia, mientras Corea del Sur ha prohibido la importación total de porcino.
El ambiente en los mercados alemanes es de incertidumbre. Las estanterías de huevos, carne de cerdo y de ave están repletas
"Sólo se vende un tercio de lo normal y me da pena de todos los animales que van a ser sacrificados" asegura un comerciante afectado.
“De momento no voy a comprar huevos. Hay que tener cuidado... Somos muchos los que tenemos miedo" afirma una berlinesa. De momento no hay constancia de que ninguno de esos alimentos haya llegado hasta España.