1.500 muertos
Pakistán está viviendo momentos críticos y el Gobierno reconoce que no da abasto para ayudar a los más de tres millones de damnificados por las lluvias torrenciales.
Las recientes inundaciones en Pakistán, las peores de los últimos ochenta años, han afectado ya a 3,2 millones de personas, según cifras gubernamentales recogidas por la ONU y el número de fallecidos asciende a 1.500.
Pakistan está comenzando ya a recibir ayuda a la que España se ha sumado con un envío de 50.000 toneladas.
Hoy ha partido desde Torrejón de Ardoz un avión con una carga de 50.000 toneladas de cocinas, kits higiénicos, mantas y material de cobijo, la Agencia Española de Cooperación Internacional colaborará también con ayuda económica.
"Estamos sentados bajo el cielo abierto, no tenemos refugio y necesitamos tiendas de campaña" declarán algunos de los afectados.
100.000 mil personas corren el riesgo de contraer enfermedades como el cólera por lo que el agua potable es una necesidad urgente. La situación es crítica, especialmente en la zona nor-oeste, pero la catástrofe alcanza ya también a la zona del Punjab, considerada el granero del país y para agravar más aún la situación la tercera presa del país, la de Warsak, en Peshawar, podría desbordarse.