LA POLICÍA CONFIRMA QUE LE MATÓ
El sospechoso de la matanza de cinco agentes durante una protesta contra la violencia policial este jueves en Dallas ha sido encontrado muerto, tras pasar más de una hora atrincherado en un estacionamiento, informó el canal local NBCDFW.
El sospechoso dijo que quería matar a "policías blancos" y que no pertenecía a ningún grupo, según ha indicado el jefe de la Policía de Dallas, David Brown, en una rueda de prensa. Aunque algunas fuentes apuntaron al suicidio, se ha confirmado que murió por disparos de la Policía.
El fallecido era uno de los presuntos autores del tiroteo que anoche se saldó con la muerte de cinco policías y que dejó a otros 6 heridos en Dallas. Después se atrincheró en un estacionamiento y aseguró haber colocado bombas por todo el centro de la ciudad.
El sospechoso, que siguió disparando contra los agentes durante las negociaciones, indicó que "el fin se acerca" y que más policías resultarían heridos y morirían, además de asegurar que había bombas en el aparcamiento y en otras partes de la ciudad.
Al margen del fallecido, la Policía mantiene en custodia a tres personas, incluyendo a una mujer que fue detenida en el aparcamiento y a otros dos individuos que circulaban por la autopista en un Mercedes.