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Piloto ruso

Encuentran muerto en España a un piloto ruso que desertó a Ucrania

Un piloto ruso que desertó el pasado mes de agosto para entregarse al Ejército ucraniano con el helicóptero que pilotaba ha sido encontrado muerto en España.

El piloto ruso Maxim Kuzmínov ha sido encontrado muerto en España después de desertar y volar a Ucrania a bordo de su helicóptero Mi-8 en una audaz operación conjunta con los servicios de inteligencia de dicho país.

La confirmación de su fallecimiento ha sido brindada por Andrí Yusov, representante de la inteligencia militar ucraniana, hoy, aunque el lugar exacto del hallazgo aún no ha sido revelado.

Según informaciones de medios españoles, la localidad de Villajoyosa, en Alicante, podría ser el sitio donde se descubrió el cuerpo de Kuzmínov, una región conocida por albergar una significativa comunidad rusa y ucraniana.

El piloto, de 28 años, egresado de la Escuela de Aviación de Sizran en el sur de Rusia, había expresado su aversión al conflicto bélico y su preferencia por labores pacíficas durante su servir en el Lejano Oriente ruso.

Amigos y conocidos de Kuzmínov señalaron su temor a perecer en combate y su anhelo de abandonar las fuerzas armadas mucho antes del estallido de la guerra en Ucrania, una decisión que se le habría negado. Enfrentando el horror de ser capturado en suelo ucraniano, el piloto, sin conocimiento de sus compañeros, emprendió un arriesgado traslado hacia Ucrania, dejando atrás a su novia en Vladivostok.

Tras aterrizar en Ucrania en una operación meticulosamente planificada, Kuzmínov rechazó involucrarse en crímenes de guerra y alentó a otros pilotos rusos a seguir su ejemplo.

La deserción del piloto ruso se hizo pública en septiembre del año anterior, cuando el GUR ucraniano difundió imágenes donde Kuzminov, de 28 años en ese entonces, narraba cómo fue contactado por la inteligencia militar enemiga y se ofrecía a pasarse al bando ucraniano a cambio de beneficios.

El video mostraba el aterrizaje de Kuzminov con su helicóptero Mi-8 de combate en una base militar de la región de Járkov, en el este de Ucrania, en un arriesgado movimiento que cruzó la frontera bajo la detección de radares, implicando a otros miembros de la tripulación que desconocían sus planes y fallecieron en un intento de fuga tras el aterrizaje.

En aquel momento, el jefe del GUR ucraniano, Kirilo Budánov, reveló que la inteligencia militar había logrado evacuar a la familia del piloto desertor de Rusia.

La trágica muerte de Maxim Kuzminov deja numerosas incógnitas y un halo de misterio en torno a las circunstancias que rodearon su deserción y posterior fallecimiento en tierras españolas.

La valentía y determinación de Kuzmínov quedan marcadas en la historia, suscitando interrogantes sobre el costo personal de la guerra y la lealtad en tiempos de conflicto.

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