EL BALANCE DEJA MÁS DE 300 MUERTOS
Se mantienen las esperanzas de encontrar supervivientes tras los terremotos que devastaron una zona del noroeste de Irán el pasado sábado. Dos personas han sido halladas con vida bajo los escombros de su casa. Su presencia fue detectada por los perros de búsqueda, según varias cadenas de televisión del país, citando a los empleados de los servicios de emergencia.
Mientras se incrementa la ayuda a los damnificados, crecen las críticas al Gobierno, sobre todo desde el Parlamento, por la que se considera mala organización y desigual distribución de la ayuda en las primeras horas. Según dijo Mohamad Ashrafi, vicegobernador de la provincia de Azerbaiyán Oriental, en cuatro de cuyos distritos se produjo el desastre, el cálculo de daños "es inicial tras los temblores y es posible que los costos se incrementen".
Ashrafi agregó que "307 aldeas sufrieron algún daño, entre el 1 y el 100 por ciento", en los terremotos del pasado sábado y agregó que se registran grietas y derrumbes en muchas casas de cuatro ciudades de la zona. Según los datos oficiales ofrecidos por el Gobierno, los dos terremotos consecutivos del pasado sábado causaron al menos 306 muertos y más de 3.000 heridos en cuatro distritos de Azerbaiyán Oriental situados al noreste de Tabriz, la capital provincial.
Unas 300.000 personas resultaron damnificadas por los seísmos, que alcanzaron los 6,2 y 6 grados en la escala abierta de Richter, según el Centro Sismológico de Irán, aunque el Servicio Geológico de EEUU eleva la magnitud los terremotos a 6,4 y 6,3 grados Richter. El Gobierno ha prometido ayudas en metálico y créditos a bajo interés a los afectados, pero eso no ha acallado las críticas de parlamentarios y políticos locales por la que consideran mala organización y desigual distribución de la ayuda en las primeras horas, así como la escasez de tiendas de campaña.
La Media Luna Roja iraní ha informóadode que ya tenían a 50.000 de los afectados en alojamientos de urgencia y que habían instalado 15.000 tiendas de campaña con sus complementos. Mohamad Reza Rezai Cuchi, vicepresidente de la Comisión de Obras Públicas y Desarrollo Urbano del Parlamento, criticó la escasa capacidad de dirección de las principales autoridades locales y provinciales, de las que dijo que no estaban presentes en el momento de los terremotos.
Rezai Cuchi, también insistió en la necesidad de construir viviendas más resistentes a los seísmos, en la escasa atención a la seguridad por parte de la Policía tras la catástrofe y el retraso en la reanudación del suministro eléctrico en muchas aldeas. Una de las cosas que coincidieron en criticar, además de Rezai Cuchi y otros diputados, el propio presidente de la Cámara, Ali Lariyani, fue la poca información ofrecida por los medios públicos sobre los terremotos y la falta de sensibilidad de la televisión oficial, que emitió un programa humorístico tras la tragedia.
Sobre el terreno, el alcalde del área de Jaye, en el distrito de Varzagan, Valiola Farach Olahi, también se quejaba y dijo a la agencia estudiantil ISNA: "Necesitamos pan, agua embotellada y comida en conserva". "Como estamos lejos del centro del terremoto y no hay información precisa de los daños que hemos sufrido, aún no nos ha llegado la ayuda necesaria para las aldeas afectadas en Jaye", recalcó Olahi, dos días después de los movimientos telúricos.
Además, algunas autoridades locales y personas afectados han criticado que las labores de búsqueda y rescate entre las ruinas se dieran por acabadas demasiado pronto, menos de 24 horas después de los terremotos. No obstante, las que se han mantenido han dado como fruto dos supervivientes.