Elecciones EEUU
Los candidatos a la presidencia de Estados Unidos Donald Trump y Kamala Harris aprovechan la campaña para atacarse.
A medida que se acercan las elecciones presidenciales de Estados Unidos, Donald Trump habla más de Kamala Harris y Kamala Harris habla más de Donald Trump. Un cruce de acusaciones entre ambos candidatos a la Casa Blanca.
Harris, desde varios actos de campaña, ha repetido una advertencia clara: "No podemos permitir que Donald Trump vuelva a ser presidente", calificando su reelección como una amenaza para la democracia estadounidense. Trump, por su parte, ha afirmado que una victoria de Kamala Harris sería desastrosa para el país.
Uno de los temas principales en la actual campaña electoral ha sido la edad y el estado físico y mental de los candidatos. Tanto Trump, de 78 años, como Harris, que mañana cumple los 60, han puesto en tela de juicio la capacidad de liderazgo del oponente.
En sus intervenciones recientes, Kamala Harris ha señalado la fatiga de Trump como un indicativo de que no está preparado para volver a ejercer como presidente. La vicepresidenta bromeó con las excusas que, según ella, ha dado el equipo de Trump sobre su aparente agotamiento, refiriéndose a las pocas entrevistas que ha concedido.
"Ser presidente de Estados Unidos es probablemente uno de los trabajos más difíciles del mundo", señala Harris. "Si está agotado de estar en campaña, ¿está realmente en condiciones de hacer el trabajo? Esa es una pregunta que necesita responder", afirmaba.
La vicepresidenta ha descrito a Trump como una figura del pasado que representa una amenaza para los valores democráticos del país. Harris lo tacha de ser "inestable" y advierte de que, si vuelve a ocupar la Casa Blanca, se pondrá en peligro el sistema democrático de Estados Unidos.
Además, ha reiterado que las elecciones del próximo 5 de noviembre son "las más importantes de nuestra vida", insistiendo en que los votantes deben elegir entre la visión del pasado que representa Trump y la promesa de un futuro más inclusivo y progresista que ella defiende.
El expresidente Donald Trump no ha tardado en responder a las críticas de Harris. El expresidente ha negado categóricamente cualquier señal de agotamiento y ha dicho que nunca ha necesitado "ni siquiera un pequeño descanso". Además, ha calificado las acusaciones de Harris como parte de lo que él denomina el "síndrome de trastorno de Trump", una burla que utiliza para describir a quienes, según él, están obsesionados con atacarlo. "Kamala Harris está tan obsesionada conmigo que apenas puede hablar de otro tema", declaró el candidato republicano durante un mitin.
Trump ha intensificado su retórica, atacando directamente la capacidad de Harris para asumir la presidencia. La califica como "la peor vicepresidenta de la historia" y cuestiona su capacidad cognitiva, afirmando que es "totalmente incompetente" para liderar el país.
En varias publicaciones en su red social, Truth Social, Trump ha insinuado que Harris tiene problemas mentales más graves que el actual presidente, Joe Biden, y ha señalado que ella "ni siquiera ha podido nombrar una sola cosa que haría diferente a Biden" durante sus cuatro años en el cargo.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com