Coronavirus
La canciller alemana Angela Merkel vivió un momento curioso después de qe el ministro de Interior,el socialcristiano bávaro Horst Seehofer, rechazó saludarla como medida de prevención por el coronavirus. La imagen se produjo en la apertura de la llamada "cumbre de la integración", cuyo objetivo es combatir el racismo.
En ese momento la canciller dio una rápida respuesta y dio un paso atrás y le sonrió mientras levantaba la mano para saludarle. En cambio una de las comisarias que se encontraba con la canciller, Annette Widmann-Mauz, hizo un saludo japonés.
La mayoría de países ya están tomando medidas con los saludos o piden cierta distancia como en Italia donde se pide que estén a un metro.
Los casos de Alemania son similares a los españoles y la cifra sigue aumentando. El Gobierno alemán toma medidas en los controles aéreos y esperann conseguir que la expansión se desacelere.