EL EJÉRCITO LISTO PARA TOMAR LAS CALLES
Las protestas políticas que estallaron en Egipto el 25 de enero están comenzando a extenderse al sector laboral, creando un nuevo frente contra el régimen de Hosni Mubarak con una lucha que aflora ahora después de muchos años de silencio.
Centenares de funcionarios, obreros y trabajadores en distintos sectores públicos y privados salieron a las calles de El Cairo para pedir un aumento del sueldo y una vida más digna, reivindicaciones que pocas veces se ven públicamente en Egipto.
Inspirados por lo que llaman "la revolución de la plaza Tahrir", trabajadores en compañías de petróleo, cemento, aluminio y azúcar, profesores, abogados, albañiles y funcionarios de Correos y Túneles, entre otros, participaron hoy en protestas y huelgas en distintos puntos del país.
El ejército toma posiciones
El ministro de Asuntos Exteriores egipcio, Ahmed Aboul Gheit, ha advertido de que el Ejército podría actuar para defender la seguridad nacional en el hipotético caso de que algunos "aventureros" intenten tomar el poder.
El Ejército recibió el pasado 28 de enero, después de que el martes anterior fuera una de las jornadas de mayor movilización contra el Gobierno, la orden de desplegarse en las calles para tomar el control de la situación después de que la Policía no lograra hacerlo.
"Debemos preservar la Constitución aunque sea modificada porque así se protegerá al país de cualquier intento de algunos aventureros de tomar el poder y supervisar el proceso de transición", ha afirmado el jefe de la diplomacia egipcia.
En ese hipotético caso de intento de asumir el poder, las Fuerzas Armadas "se verían obligadas a defender la Constitución y la seguridad nacional egipcia". "Y nos encontraríamos a nosotros mismos en una situación extremadamente seria", ha añadido.
El ministro de Asuntos Exteriores egipcio ha realizado estas declaraciones en una entrevista concedida a la cadena de televisión Al Arabiya, difundida por la agencia de noticias estatal MENA.
El Ejército ha tenido un papel neutral ante las manifestaciones, a diferencia de la Policía, que ha actuado violentamente contra los manifestantes, y ha asegurado con anterioridad que protegerá a los participantes en las protestas y les ha pedido que acaben las movilizaciones para "salvar a Egipto".
También, las protestas políticas que estallaron en el país el día 25 de enero están comenzando a extenderse al ámbito laboral, pudiendo haber huelgas en varios sectores, creando así, un nuevo frente contra el régimen de Hosni Mubarak.
EEUU pide más esfuerzos para cumplir las demandas de los manifestantes
Estados Unidos ha reclamado este miércoles al Gobierno egipcio que haga más esfuerzos para cumplir las demandas de los manifestantes, que continúan, por décimosexto día consecutivo congregados en la plaza Tahrir de El Cairo para exigir la salida del presidente, Hosni Mubarak.
Por otra parte, el ministro de Asuntos Exteriores egipcio, Ahmed Aboul Gheit, ha rechazado la petición del vicepresidente estadounidense, Joe Biden, de retirar de inmediato el estado de emergencia y ha criticado a Washington porque parece querer imponer su voluntad en el país árabe y por estimar que sus consejos políticos no ayudan.