EN EL MARCO DE LA 'OPERACIÓN ÁGUILA'
El Ejército egipcio ha desplegado nuevos refuerzos en los alrededores de la localidad de Al Arish, en la península del Sinaí, poco después de un nuevo enfrentamiento entre las fuerzas de seguridad y hombres armados en la localidad.
Entre los refuerzos hay vehículos blindados, tanques, baterías antimisiles y cientos de soldados, provenientes del Comando Militar de Ismailiya, según ha informado el diario egipcio 'Al Ahram'.
Los refuerzos son parte de la 'Operación Aguila', lanzada en la madrugada del miércoles con el objetivo de asegurar puntos vitales de la península del Sinaí ante los últimos ataques por parte de grupos armados, uno de los cuales causó la muerte a 16 agentes de Policía egipcios en una comisaría ubicada cerca de la frontera entre Egipto e Israel.
El miércoles, las Fuerzas Armadas egipcias aseguraron que no detendrán la operación "hasta que se aplaste toda actividad terrorista y criminal" en la zona, según fuentes militares.
"Los líderes de los aparatos de seguridad han formado un comité para ejecutar y supervisar la operación", agregaron. A última hora este mismo jueves, el Gobierno israelí ha acordado permitir a Egipto el uso de helicópteros de ataque en la península del Sinaí, algo inédito desde la firma del tratado de paz entre ambos en 1979.
Los Acuerdos de Camp David prohíben a Egipto desplegar a sus Fuerzas Armadas o armamento pesado en las regiones norte y este de la península.
Los ministros israelíes han autorizado la petición mediante una conversación telefónica que ha tenido como principal objetivo acelerar trámites, según fuentes oficiales.
La medida tiene efecto retroactivo, por lo que da el visto bueno al despliegue aéreo realizado en los últimos días por parte de Egipto. El único matiz que aparentemente impone Israel es que los helicópteros deben ser usados en acciones "específicas" y no de forma constante.
Ningún grupo ha reivindicado aún el ataque
Los asaltantes utilizaron un vehículo policial robado para infiltrarse en la comisaría, donde dispararon indiscriminadamente a los policías destinados en ella, matando a 16 de ellos y dejando siete heridos.
Posteriormente, se hicieron con el control de dos vehículos blindados con los que embistieron contra la valla de la frontera para penetrar en territorio israelí.
Efectivos del Ejército israelí se enfrentaron a los invasores y la aviación israelí bombardeó uno de los dos todo terrenos blindados. El Ejército israelí respondió de inmediato al ataque y nada más cruzar la frontera se produjo un tiroteo. La aviación respondió también con rapidez y el segundo blindado fue bombardeado.
A pesar de que el Ejército egipcio, que sigue ostentando un gran poder, llamó "infieles" a los supuestos 'yihadistas' que ejecutaron el ataque, Hermanos Musulmanes afirmó que el ataque "puede ser atribuido al Mossad", los servicios secretos israelíes para el exterior.
El objetivo, según afirmó el grupo en su página web, es boicotear el mandato de Mohamed Mursi, candidato de los Hermanos Musulmanes recientemente elegido presidente de Egipto.
Sin embargo, el Gobierno israelí ha desmentido que tenga relación alguna con el ataque y ha subrayado que "incluso la persona que dice esto, cuando se mira a sí mismo en el espejo no se cree el sinsentido que está diciendo".
Hasta el momento, ningún grupo ha reclamado la autoría del ataque, aunque la Fiscalía Militar egipcia ya ha lanzado una investigación para desvelar quiénes fueron los responsables del mismo.