Avenida Luxor
Egipto ha conseguido inaugurar la avenida de Luxor, un camino de casi 3 kilómetros que une los templos de Luxor y Karnak tras más de 50 años de restauración.
Reabre el Luxor, la avenida de las esfinges y lo ha hecho a lo grande. Carros faraónicos, más de cuatrocientos artistas, música, danza y fuegos artificiales. Así ha sido la apertura de la avenida de las esfinges. Se trata de una vía de casi 3 kilómetros que conecta los templos de Karnak y Luxor.
La vía tiene unos 250 metros de anchura y está cortejada por una doble fila de esfinges con cuerpo de león y cabeza humana o de carnero, que es el símbolo de Amón Ra. El primer vestigio que se encontró de este lugar fue el 1949, cuando se hallaron un total de 8 esfinges en las proximidades del templo de Luxor. Poco a poco, comenzó la misión de recuperación.
Llevaba siglos sepultada bajo la arena y ahora pretende convertirse en el mayor museo del mundo al aire libre. Se trata de un verdadero espectáculo a orillas del Nilo que ha traído de vuelta la Opet, un festival que durante siglos se festejaba la fertilidad y las crecidas del río. Se trataba de un época de bendición y júblio.
La restauración de la trimilenaria avenida ha durado más de 50 años. Es considerada por muchos la más importante del Antiguo Egipto, a pesar de que fue difuminada y parcialmente sepultada bajo otras construcciones. La intención es conseguir reactivar el turismo en el país. La que fue la capital de Egipto durante siglos hoy, 26 de noviembre, nos vuelve a trasladar a la época faraónica.
Avenida Luxor
Esta avenida fue construida hace tres milenios y durante siglos ha permanecido sepultada bajo cientos de viviendas y diferentes edificios. Se trata de un recorrido de 2.700 metros en el que se pueden encontrar más de un millar de esfinges. Su función era enlazar los templos faraónicos de Karnak y Luxor.
La avenida Luxor es un recorrido mágico que, después de muchos trabajos arqueológicos, han conseguido inaugurar esta pasado jueves, 25 de noviembre. Se ha hecho una celebración que ha permitido resucitar la Opet. Como ya ocurría en el Antiguo Egipto, una barca ceremonial ha efectuado la ruta entre ambos templos.
En este recorrido, ha rendido culto a Amón-Ra, la deidad suprema, su esposa Mut y su hijo Khonsu. Al mismo tiempo, había música, bailes y diferentes artistas que marcaban el ritmo de la ceremonia. Sin embargo, para llegar a este punto, han tenido que hacer muchos esfuerzos y enfrentarse a diferentes contratiempos que se han ido encontrando.