pretenden crear una liga mundial
Parecía que solo podía pasar en las películas, pero ahora la realidad supera a la ficción y traspasa la pantalla. Dos razas robóticas se enfrentan, pilotadas por humanos, por primera vez en un combate.
A un lado del cuadrilátero Japón con Kuratas, seis toneladas de hierro y unos 90 caballos de potencia. Al otro lado del ring Estados Unidos con Iron Glory, casi el mismo peso que su contrincante y la potencia de dos cortacésped, 24 caballos.
Al mando, sus creadores y en el ambiente una expectación que tan solo ha durado 20 segundos, lo que ha tardado el japonés en derribar a su contrario: "Veía que el robot se me caía encima y me protegí la cabeza", explica su piloto.
Sin embargo, Estados Unidos escondía una pequeña sorpresa de 12.000 kilos, 430 caballos y más de 2 millones de euros, Eagle Prime y esta vez sí, aunque su rival intentó defenderse con varias ráfagas de bolas de metal, Eagle Prime, armado con una sierra dentada, destrozó parte del armazón del japones, proclamándose ganador.