Guerra en Ucrania
El Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania, del que forma parte Estados Unidos, se ha reunido este martes en Alemania
Estados Unidos ha reafirmado su apoyo a Ucrania durante la sexta reunión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania, celebrada en la base Aérea de Ramstein, Alemania. En la misma han estado presentes el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, el ministro de defensa ucraniano, Rustem Umjerow así como el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin y el general Charlas Q. Brow.
Ha sido precisamente el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, el encargado de expresar este apoyo, recordando a los aliados la importancia de proporcionar a Ucrania "las armas que necesita para defenderse". Durante la intervención, Austin ha llegado a afirmar: "No nos engañemos, Putin no se detendrá en Ucrania (...) la supervivencia de Ucrania está en juego y toda nuestra seguridad también. Así que seguiremos unidos para resistir la campaña de conquista de Putin y seguiremos manteniendo la fe en el pueblo ucraniano".
"Ahora las tropas ucranianas se enfrentan a duras condiciones y a duros combates", ha recalcado Lloyd en un intento de ilustrar la compleja situación a la que se están enfrentando los combatientes y civiles, ya que como explica, estos "soportan el bombardeo constante de misiles rusos y aviones no tripulados iraníes, pero Ucrania no retrocederá y tampoco lo hará Estados Unidos".
La sexta reunión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania ha tenido lugar unos días después de que se conociera la nueva victoria electoral del presidente ruso ,Vládimir Putin, y en ella los representantes estadounidenses además de reiterar el apoyo de los países aliados, apelando en múltiples ocasiones a la unidad de los mismos en torno a Ucrania, han hecho mención de algunos de los paquetes de ayuda internacional aprobados. Entre ellos se encuentra Chequia, que anunció el suministro de 800.000 rondas de municiones.
En la misma línea, Lloyd ha hecho mención a la aprobación de una nueva ayuda de 300 millones de dólares por parte de su país, destinadas a cubrir las necesidades más urgente en el ámbito de defensa antiaérea, artillería y baterías antitanques.