BÉLGICA | CASOS DE PEDERASTIA
La polémica desatada en Bélgica por los casos de abusos sexuales sigue viva. La Iglesia Católica belga ha reconocido "errores" en la gestión de los casos de abusos sexuales a menores y se comprometió a hacer todo lo posible por las víctimas, para quienes el mensaje -en el que no se concretaron ni sanciones ni compensaciones- es insuficiente.
Barbara Blaine es una de las víctimas del clero belga. La mujer ha mostrado una foto suya de la época en la que un cura abusó de ella. Paso ese sufrimiento cuando tenía tan sólo 8 años, algo que aún no ha olvidado.
"No podía decir nada. Me dijo que parase de temblar, que no me iba a hacer daño", ha afirmado la víctima. Unas duras declaraciones de un día que marcó el resto de su vida.
Barbara no es la única. Hasta 507 denuncias han aparecido en un informe publicado hace tres días. Cada una de ellas, con testimonios estremecedores.
En 1990, el sacerdote y misionero belga Eric Dejaeger abusó de nueve niños esquimales en Canadá. Durante años ha sido uno de los rostros más buscados por la Interpol. Ahora, con 63 años de edad, ha decidido entregarse a la policía de Lovaina. Dejaeger se encontraba oculto en una casa vinculada a la abadía católica flamenca de Blancen, cerca de Lovaina.
Por su parte, el Arzobispo de Bélgica, Andrex Joseph Leonard, ha declarado que son casos demasiado antiguos para que sean tenidos en cuenta por la ley. Sin embargo afirma que se puede escuchar a las víctimas y llegar hasta los autores de los hechos.
Este escándalo en la Iglesia Católica aumenta la tensión del polémico viaje del Papa a Reino Unido. Varias voces se han alzado contra los gastos que acarrea la visita de Benedicto XVI, además de que algunos anglicanos le acusan de encubrimiento de los abusos sexuales.