A CASI MIL METROS DE PROFUNDIDAD
Un espeleólogo se ha quedado atrapado a 1.100 metros de profundidad en una cueva de Alemania. Metro a metro, los rescatadores arrastran la camilla donde está fuertemente amarrado el cientifico Johan Westhauser.
Tienen que mover casi 100 kilos de peso por una galería angosta con paredes resbaladizas. En algunos tramos deben utilizar un complejo sistema de tirolinas con cables de acero.
Un rescate lento y complejo
El rescate está siendo lento y muy complejo. En una semana han recorrido 400 metros desde el lugar donde cayó herido hasta la base 3 y ahora tienen que cruzar un barranco con una cascada de 200 metros.
En total, los expertos calculan que todavía tardarán cinco días más en superar casi medio kilómetro para dejar las tinieblas y ver la luz.
Quedó atrapado por desprenderse rocas
Hace 9 días, el científico sufrió un fuerte golpe en la cabeza por un desprendimiento de rocas. Le acompañaban dos amigos. Uno de ellos regresó a la superficie para pedir socorro. Tardó 12 horas.
El espeleólogo accidentado es uno de los descubridores de esta gruta, la más profunda de Alemania y una de las más peligrosas de Europa.