Rusia y Ucrania
Tras hacer un recorrido por las instalaciones de la central, los inspectores aseguraron que la integridad de la planta "había sido violada". Rusia acepta una presencia permanente de los expertos.
Los expertos de la ONU podrían quedarse allí más tiempo para inspeccionar la central nuclear de Zaporiyia. El Ejército ruso, que es el que controla la central, ha permitido que dos de los 14 inspectores de la ONU se queden de forma permanente dentro de la planta.
Este jueves, todos los inspectores que forman el equipo de la agencia nuclear de Naciones Unidas pudieron visitar la central durante unas horas. Tras hacer un recorrido por las instalaciones de la central, los inspectores aseguraron que la "integridad de esta planta había sido violada". En la visita, los expertos de la ONU han estado acompañados en todo momento por personal ruso. Incluso uno de ellos mostró un misil que según su versión, fue lanzado por Ucrania.
“Estamos terminando nuestra esperada visita a la planta nuclear de Zaporiyia. Acabo de completar un primer recorrido por las zonas clave que quería ver en la primera aproximación a la instalación”, aseguró este jueves Rafael Grossi en un vídeo publicado en Twitter. “Por supuesto hay mucho más que hacer, mi equipo se queda, y lo más importante es que estamos estableciendo una presencia continua del OIEA aquí”, anunció, sin dar más detalles.
La misión de expertos ha logrado llegar en medio de los combates a la instalación con el objetivo, según la OIEA, de “llevar a cabo las actividades necesarias de seguridad nuclear y salvaguardia”.
Tres horas bajo control ucraniano
Antes de llegar a la central nuclear de Zaporiyia, el convoy con los inspectores de la OIEA estuvo detenido bajo control de Ucrania durante tres horas. Anteriormente, ya avisaba Grossi de que "el riesgo era muy alto" debido al recrudecimiento de los combates en la zona.
Este mismo jueves, según informó Energoatom, uno de los reactores de la planta tuvo que ser apagado tras nuevos bombardeos. El ministerio ruso de Defensa ha asegurado que la situación está “bajo control”.