Argentina
Los hechos ocurrieron en Argentina. Las dos hermanas fueron separadas hacía 50 años después de que su madre falleciera.
Ramona y Angélica eran bebés cuando su madre falleció en Misiones, Argentina. Cada una tuvo un destino diferente y tuvieron que pasar 50 años para que se reencontraran.
Ramona Ríos tenía unos nueve años cuando la tragedia sacudió su vida. Ella no recordaba mucho, pero sabía que tenía tres hermanos: Angélica, Clementino y Sara Arévalo. Al contárselo a sus hijos, decidieron buscarlos.
Uno de sus hijos, Carina, se unió a un grupo de Facebook y publicó una foto de su madre con el objetivo de encontrar a sus tíos. "Ella es Ramona Ríos, que busca a sus hermanos", escribió junto a la fotografía.
Hay momentos en los que querés dejar de buscar, porque desgasta. Pero las historias hacían que fuera posible
"Mi madre Ramona es la mayor de las cuatro. Vivían en Misiones, El Dorado. Ella tiene recuerdos muy bajos ya que tenía 9 años cuando fue apartada de ellos. Posiblemente a una de las chicas la llevaron con una tía que estaba casada con un policía o gendarme. El varón tal vez fue llevado al Paraguay, ya que su padre era de allá. La otra no se sabe. Ojalá alguien se identifique con esta historia", explicó.
La hija contó a 'Diario Huarpe' que leían cada historia que les llegaba. "Hay momentos en los que querés dejar de buscar. Porque sí, porque desgasta. Pero seguimos porque las historias de reencuentro hacían que pareciera posible", explicó.
Mamá salió con los ojos llorosos. 'Es ella' nos dijo
Hasta que un día, Carina recibió un mensaje esperanzador: "Hola soy Angélica, hace muchos años me escribiste". "Empezamos a conversar. Íbamos comparando las historias y sí, tenían un montón de cosas en común. Además, físicamente son muy parecidas", cuenta.
Seguidamente, las dos hicieron una videollamada. "Ese día las dejamos a las dos solas por videollamada. Mamá salió con los ojos llorosos. 'Es ella' nos dijo", recuerda.
Por ello, comenzaron a gestionar el viaje para que se vieran debido a que sus otros dos hermanos habían fallecido. "Si dejábamos pasar el tiempo iba a ser demasiado tarde", dijo.
50 años después, Angélica y Ramona se reencontraron fundiéndose en un largo abrazo entre lágrimas.