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El pequeño Liam tenía quince meses cuando fue embestido por una conductora ebria mientras su tía le paseaba en el carrito por un paso peatonal en Hawthorne, Los Ángeles . El impacto le provocó graves lesiones de las que el bebé no ha podido recuperarse.
Tras días de ingresado en el hospital Harbor-UClA, de Hawthorne, el pequeño fue declarado en muerte cerebral. Sus padres decidieron donar sus órganos, tal y como ha compartido el progenitor del pequeño, Marcus Kowal, en su perfil de Instagram
Según recoge el portal ABC7, la responsable del accidente, una mujer de 72 años, intentó huir tras el siniestro pero finalmente fue detenida por varios testigos hasta ser interceptada por la policía. Tras someterse a un test de alcoholemia se constató que la conductora estaba ebria en el momento del siniestro.
El padre del bebé grabó un mensaje en su perfil de Instagram en el que explicaba que acababa de llegar del hospital donde se había despedido de su hijo. Roto de dolor, hizo un llamamiento para que nadie beba alcohol cuando va a coger el coche.
Kowal compartió una imagen dando la mano a su pequeño ya sin vida que ha generado miles de reacciones en la red social.